Tratamientos de la menopausia

Tratamientos de la menopausia

La menopausia es el fin de los ciclos ovulatorios de la mujer, es decir, el final de la vida fértil y de las menstruaciones. No todas las mujeres necesitan tratamiento para la menopausia, ya que muchas apenas experimentan molestias; para aquellas que sí los necesitan, se puede recurrir a la terapia hormonal, las hormonas bioidénticas o los tratamientos naturales.

Índice

 

Tratamientos para la menopausia

Normalmente no es necesario realizar ninguna prueba para confirmar el diagnóstico de la menopausia, pero en aquellos casos en los que hace falta porque surgen dudas por edad o por otro motivo, el médico puede recomendar análisis de sangre para comprobar los niveles de la hormona foliculoestimulante (FSH) y estrógeno (estradiol), porque los niveles del primero aumentan y los de estrógeno disminuyen cuando llega la menopausia. También se puede analizar los niveles de tirotropina (TSH) porque las mujeres con hipotiroidismo pueden presentar síntomas parecidos a los de ña menopausia.

Una vez confirmado que la mujer sufre los síntomas propios de la menopausia, si estos son muy molestos e intensos e interrumpen su vida diaria se puede recurrir a diversos tratamientos para paliar estos síntomas:

- Terapia hormonal sustitutiva. Se administran estrógenos artificiales para aliviar los sofocos y otros síntomas. Dado que se ha demostrado que la terapia con estrógenos puede aumentar en algunos casos el riesgo de desarrollar cáncer de mama o de útero, así como enfermedades cardiovasculares, el médico indicará la dosis más baja posible durante el tiempo más corto. En las mujeres que todavía tienen útero se suele administrar también progesterona. Esta terapia se considera eficaz en los primeros 10 años de climaterio y hasta los 59 años, pero no debe usarse más tiempo ni en mujeres mayores. Tampoco deben recurrir a ella mujeres con antecedentes de enfermedad cardíaca o factores de riesgo, como colesterol alto, mujeres con antecedentes familiares o personales de cáncer de mama, aquellas que tienen niveles altos de triglicéridos o antecedentes familiares de enfermedad de la vesícula biliar, de accidente cerebrovascular o coágulos sanguíneos.

- Estrógeno vaginal para aliviar la sequedad vaginal, un síntoma que dificulta las relaciones sexuales.

- Antidepresivos en dosis bajas. Los antidepresivos llamados «inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina» (ISRS) pueden disminuir los sofocos menopáusicos y aliviar los cambios de humor.

- Anticonceptivos hormonales de baja dosis, que pueden ser útiles para reducir los calores, la sequedad vaginal y los cambios de humor. No obstante, hay que tener cuidado con ellos si fumas o si usas otros anticonceptivos hormonales combinados como el anillo vaginal o los parches cutáneos, ya que se aumenta el riesgo de sufrir coágulos sanguíneos e hipertensión.

- Gabapentina. Este fármaco se usa para el tratamiento de las convulsiones, pero también ayuda a reducir los sofocos, especialmente por la noche.

- Clonidina, un medicamentos que se usa para el tratamiento de la presión arterial alta, pero que también puede proporcionar cierto alivio de los sofocos.

- Medicamentos para prevenir o tratar la osteoporosis como suplementos de vitamina D.

¿Las hormonas «bioidénticas» son mejores?

Desde hace unos años se usan las hormonas bioidénticas, hormonas personalizadas que se elaboran a partir de los análisis hormonales de cada mujer para crear un tratamiento hormonal personalizado que se ajuste a las necesidades de cada una.

Algunos médicos aseguran que son mejores y más seguras que los tratamientos hormonales normales, sin embargo, la Administración de Alimentos y Medicamentos estadounidense (FDA) asegura que no son más seguras ni más eficaces. Ellos se basan al afirmar esto en que muchas de las hormonas de los medicamentos bioidénticos no son diferentes a las de la terapia hormonal tradicional y que incluso los tratamientos traduicionales ya continenen hormonas bioidénticas.

Asimismo, aunque se extraigan de plantas, no son naturales porque deben procesarse comercialmente para convertirse en bioidénticos. Además, desde la administración advierten de que los productos de las farmacias que preparan compuestos personalizados de hormonas bioidénticas no están sujetos a las mismas pautas rigurosas de garantía de la calidad que los tratamientos hormonales, por lo que podrían resultar peligrosos si no se fabrican adecuadamente.

No obstante, es cierto que algunas mujeres pueden beneficiarse con las dosis y las presentaciones especiales de las hormonas bioidénticos, pero hace falta tener cuidado de dónde se consiguen y hacer más estudios al respecto.

Tratamientos naturales

Existen terapias complementarias o alternativas que pueden ser eficaces en algunos casos, como suplementos vitamínicos o herbales, aunque hay que tener cuidado al tomarlos y consultar siempre antes con el médico ya que algunos suplementos pueden interferir con los medicamentos e impedir que surtan efecto correctamente.

Algunos de estos tratamientos naturales son:

- Cohosh negro. Se usa para tratar los síntomas de la menopausia, como los sofocos.

- Trébol rojo. Contiene fitoestrógenos, hormonas naturales similares al estrógeno que alivian los sofocos y otros síntomas, pero no deben tomarse si se sigue un tratamiento hormonal con estrógenos.

- Soja. Contiene isoflavonas, un tipo de fitoestrógeno.

- Prácticas mentales y corporales. El yoga, el tai chi y la acupuntura pueden ayudar a reducir los síntomas de la menopausia.

Además, se recomienda seguir una dieta sana rica en nutrientes como el calcio o la vitamina D y hacer ejercicio moderado de manera regular.

Fuente: Clínica MayoNorth American Menopause SocietyOffice on Women´s HealthSood, R., Faubion, S.S., Kuhle, C.L., Thielen, J.M., Shuster, L.T. (2014). Prescripción de terapia hormonal de la menopausia: un enfoque basado en pruebas. International Journal of Women's Health; 6: 47-57.

Redacción: Irene García

Consulta gratuita con un médico especialistaAgeSwitch

También te puede interesar

×