¿Cómo saber si es estrés o menopausia?

¿Cómo saber si es estrés o menopausia?

El estrés puede causar síntomas parecidos a los de la menopausia y la llegada de esta también puede aumentar nuestro estrés. Por eso, si estás rondando los 50 años y estás muy estresada, puede que dudes sobre si es solo estrés o algo más.

Índice

Menopausia precoz a causa del estrés

Existen varios motivos que pueden causar menopausia precoz, es decir, entrar en la menopausia antes de lo normal, entre los 45 y los 55 años. Enfermedades, extirpación de los ovarios, tratamientos de quimioterapia… son algunas de las causas, pero también puede serlo el estrés. De hecho, los expertos afirman que las mujeres que sufren un alto nivel de estrés durante un tiempo prolongado tienen un 80% más de riesgo de tener la menopausia precoz.

Esto se debe a que el exceso de cortisol, la hormona del estrés, puede causar efectos secundarios negativos en el organismo, como trastornos del sueño, mala digestión, aumento de peso, mala memoria y alteraciones hormonales.

Los altos niveles de cortisol pueden provocar amenorrea (ausencia de la menstruación) ya que el exceso de cortisol provoca alteraciones en los niveles de progesterona y estrógeno, lo que puede causar la aparición de los síntomas de la menopausia antes de la edad normal. Y, además, puede hacer que estos síntomas (sequedad vaginal, aumento de peso, irritabilidad, sofocos y sudores nocturnos) se intensifiquen, haciendo más dura esta transición.

La buena noticia es que reducir los niveles de cortisol consigue equilibrar de nuevo los niveles de estrógenos y progesterona, reduciendo los síntomas de la menopausia.

La menopausia también es una causa de estrés

Además de ser una causa de la menopausia precoz en algunas mujeres, el estrés también puede ser una consecuencia de la llegada de esta nueva etapa.

El descenso de los estrógenos afecta a las emociones de las mujeres ya que esta hormona controla la cantidad de serotonina que produce el cerebro y la serotonina es un neurotransmisor que regula el estado de ánimo y las emociones. Cuando está baja, nos sentimos más cansados, con menos energía, de mal humor e irritables.

También descienden otros neurotransmisores como la oxitocina y la dopamina que canalizan las sensaciones placenteras. Por eso es normal sentirse especialmente irritada, triste y de mal humor.

Asimismo, durante la menopausia son frecuentes los trastornos de sueño a causa de los sudores nocturnos, la irritabilidad, las preocupaciones, etc. Sin contar con el resto de los síntomas con los que debemos lidiar en esta etapa, como los sofocos, la incontinencia urinaria, la sequedad vaginal, el descenso de la libido… Si sumamos todo esto y lo concentramos en unos meses, es totalmente normal que estemos estresadas y que sintamos que no podemos con nuestra vida.

Pero tranquilas, todo tiene solución.

¿Cómo evitar el estrés en nuestra vida?

1. Antes de acostarte, haz un listado de las tareas que debes hacer al día siguiente. Planifica bien las que es necesario que hagas y prioriza, no intentes hacerlo todo. Sé realista para no estar estresada.

2. Practica técnicas de relajación, respiración profunda, meditación… todas estas técnicas ayudan a enfocarse en el presente y alejar las preocupaciones, reduciendo el estrés.

3. El yoga o el taichí también son disciplinas que nos ayudan a reducir el estrés.

4. El ejercicio físico reduce los niveles de cortisol y aumenta la dopamina, lo que nos hace sentir mejor.

5. Escuchar música relajada o hacer algo que te haga sentir mejor te puede ayudar a reducir los niveles de cortisol.

6. Salir a pasear por la naturaleza y tomar el sol también nos ayudan a reducir el estrés.

7. El sexo es un magnífico antiestresante, así que no dudes en mantener relaciones sexuales con tu pareja o contigo misma para sentirte menos estresada y más feliz y relajada. Durante las relaciones sexuales liberamos oxitocina y dopamina, neurotransmisores que nos hacen sentir bien. Si sufres problemas de libido o de sequedad vaginal a causa de las alteraciones hormonales de esta etapa recurre a suplementos naturales de damiana o maca y a lubricantes naturales.

8. Sigue una dieta sana y equilibrada. La alimentación es importante para cuidar nuestro estado emocional. Algunos alimentos ayudan en la fabricación de serotonina, como carnes magras, cereales integrales, legumbres, plátano, lácteos, frutos secos, cacao piro, piña, etc.

9. Dormir bien y descansar también nos ayuda a reducir el estrés al sentirnos menos cansado, con más energía y de mejor humor.

10. Dedícate tiempo a ti misma, a tus aficiones, a salir con tus amigas, a darte un baño caliente después de una dura jornada… Ya es hora de que te cuides y te mimes.

11. La terapia de sustitución hormonal, al equilibrar los niveles de estrógenos, también ayuda a reducir el estrés. Pregunta a tu profesional de ginecología o medicina la conveniencia de tomarla en tu caso.

12. Si no consigues reducir el estrés por ti sola, no dudes en recurrir a un profesional de psicología que te ayude a controlar estas emociones y a gestionar el estrés y la ansiedad.

Fuente: Dra. Laparte Escorza, Carmen; Dr. García Manero, Manuel, (2005), Menopausia. Cómo vivirla y superarla sin miedo, León, Ed. Everest. Becerra-Fernández, Antonio, 2003, La edad de la menopausia. Ed. Díaz de Santos. (S.A.)

Redacción: Irene García

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